OTOÑO
La paciencia fué mi compañera.
Siguiéndote, mi vida, la fué perdiendo.
Me has dado tanto amor,
que ya no puedo con la carga.
La desdicha y yo estamos juntas y
abandonadas.
Me has mostrado la belleza de la compresión.
Te elevas lentamente, hasta el manto del cielo.
Mientras me voy desplomando exhausta,
rica en sabiduría y pobre en soledad.
Ven, los arroyos errumpen con su danza.
Entre las rocas se puede oir el canto
de los enamorados...
Se aproxima el otoño y sus nuevas semillas de amor
vestiran mi corazon de galas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario